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Este es un sitio acerca de las BUENAS NOTICIAS, un mensaje que ha de impactar tu vida.

En el auge del Imperio Romano, el mundo había escuchado y dado muchas vueltas en su cabeza ante estas noticias. Estas noticias cambiaron al mundo en esa época, que incluso en la actualidad de nuestras vidas, lo sepamos o no, hemos sido afectados por ellas. Todas estas noticias llevó a la creación de libros, palabras separadas por espacio con significado, signos de puntuación, palabras en mayúsculas y minúsculas, universidades, hospitales y hasta orfanatos fueron fundados por las personas que entendieron como estas “buenas noticias” afectan a la sociedad.

Sin embargo, mas que teoría acerca de las buenas noticias, estas han cambiado profundamente la manera en que las personas se ven a si mismos, ven a otros, a la vida, la muerte y a Dios. Las buenas noticias son conocidas como “El Evangelio” y ha adquirido el compromiso y lealtad de transmitirse en corazones y mentes de muchas personas desde esa era.

Se cree que en la actualidad, la palabra evangelio no nos trae las buenas noticias que quisiéramos. Muchos de nosotros lo asociamos con supersticiones desactualizadas, instituciones obsoletas o lo asociamos con algo pequeño y sin impacto. Y es que no seamos antagonistas ante esto pero preferimos no hacerle mucho caso o darle la debida importancia.

Hoy en día, nos preguntamos si el evangelio es creíble o no. Otras ocasiones, nos preguntamos, si en verdad ha afectado el desarrollo humano desde el origen de este.

Y con nuestras vidas totalmente ocupadas, no tenemos ni el tiempo ni el espacio para considerar, investigar y cuestionar de qué trata todo esto de las buenas noticias.

Esta es la razón por la que he puesto este sitio web y blog juntos, para ofrecerles una oportunidad de entender, evaluar el evangelio y racionalizar en el. En pocas palabras, indagar y profundizar en lo leído.

Si es tu primera vez aquí, quizá quieras ir a: “Acerca de mí” que es donde explico mi historia con el evangelio.

Espero que puedas darle un vistazo, tomate tu tiempo de evaluar y participar en consideración del Evangelio.